lunes, 7 de noviembre de 2011

TEMA 2: LA FILOSOFÍA COMO RACIONALIDAD TEÓRICA


Tema 2. Verdad y realidad

1.      Introducción: grandes problemas de la metafísica occidental

1.1.   ¿Qué es la realidad para ti? ¿Cómo la definirías?
1.2.   ¿Qué contenido y elementos de reflexión se incluyen en la pregunta por “lo que hay”?
1.3.   Dalí (1904-1989) trató de llamar la atención sobre la importancia que posee para nosotros el mundo inconsciente, el mundo de nuestros deseos y pulsiones, que no responde a las reglas lógicas de la realidad física. ¿Qué pensador hizo de los sueños una de las claves que nos desvelaba nuestro mundo inconsciente? ¿Cómo se llama su método?
1.4.   Relación entre conocimiento, lenguaje y realidad.
1.5.   Explica qué entendemos por subjetividad trascendental. ¿Por qué este concepto colabora en la constitución de lo que denominamos realidad? ¿Puede la subjetividad trascendental modificarse? Y si es así ¿qué se infiere de ello?
1.6.   Explica por qué no podemos acceder a la “realidad en sí”.
1.7.   ¿Qué son según Kant los elementos a priori de la sensibilidad?
1.8.   ¿Qué quiere decir que todo nuestro conocimiento procede de la experiencia? ¿Qué elementos intervienen en el acto de conocer además del objeto percibido?
1.9.   Explica qué son las “categorías”
1.9.1.     ¿Qué utilidad tienen?
1.9.2.     ¿Por qué existen diversas categorías?
1.9.3.     ¿Qué es una red conceptual?
1.9.4.     ¿En qué sentido podemos hablar de estratos o niveles de realidad?
1.9.5.     ¿Qué papel juega el sujeto en la percepción y construcción de la realidad?


2.      ¿Qué es conocer? Reflexiones filosóficas acerca del conocimiento

1.      Conocimiento y representación.
2.      Teorías del conocimiento.
2.1.   Realismo.
2.2.   Idealismo.
2.3.   Hermenéutica.
3.      Conocimiento y realidad:
3.1.   El falsacionismo de Karl Popper.
3.2.   La Escuela de Frankfurt.
3.3.   Gadamer y la corriente hermenéutica.

3.      La verdad como cuestión.
3.1.   La verdad como adecuación. ¿En qué consiste?
3.2.   ¿En qué se dan la verdad o la falsedad?
3.3.   Señala las objeciones contra la teoría de la verdad como adecuación
3.4.   La verdad como coherencia: ¿en qué consiste?
3.4.1.     ¿qué tiene que ver la idea de un saber absoluto con la teoría de la coherencia?
3.5.   La teoría pragmatista de la verdad
3.5.1.     ¿Qué es el pragmatismo?
3.5.2.     ¿Cómo se entiende el pragmatismo en las teorías científicas?
3.6.   Criterios de verdad y alcance del conocimiento
3.6.1.     ¿Qué es el escepticismo?
3.6.2.     ¿Qué problemas plantea la “evidencia” como criterio de verdad?
3.6.3.     Diferencias entre “criterio de verdad” y “criterio de certeza”.
3.6.4.     Enumera los principales criterios de verdad.


jueves, 3 de noviembre de 2011

LUTERO Y LA REFORMA PROTESTANTE

Lutero fue el iniciador de la Reforma protestante, fue educado con gran rigor en su casa y en la escuela. El propio Lutero ha narrado como su madre le azotó hasta hacerle sangrar por haber comido una nuez sin permiso. Miembro de una familia de agricultores, había nacido en la localidad sajona de Eisleben el 10 de noviembre de 1483. La familia -sus padres se llamaban Hans Luther y Margarita Ziegler- se trasladó a la región minera de Mansfeld donde, tras unos primeros años de grandes esfuerzos, consiguió prosperar. Hans pudo dar a su hijo primogénito una buena educación, estudiando en Magdeburgo y Eisenach antes de iniciar la carrera de leyes en Erfurt. En la universidad de Erfurt conoció el joven Martín a Erasmo y en el verano de 1505, impresionado por una tormenta que le sorprendió en pleno campo, decidió hacerse monje, lo que no gustó al padre.

Ingresó como novicio en el convento agustino de Erfurt cuando tenía 22 años y empieza a enseñar filosofía al tiempo que estudia teología. En 1506 pronunció los votos religiosos y al año siguiente es ordenado sacerdote. En 1509 obtendrá el bachillerato en Teología en Wittenberg e iniciará su magisterio en la recién creada Universidad de Wittenberg. Será enviado a Erfurt como profesor de teología, interesándose por la reforma monástica que se estaba desarrollando en aquellos momentos.
En 1510 se traslada a Roma para impedir el proyecto de unificación de los conventos agustinos reformados con los no reformados. En la Ciudad papal no le hicieron mucho caso pero consiguió importantes indulgencias y contempló el poco ejemplar espectáculo de la Roma libertina del momento, impresionado por la ostentación y la decadencia religiosa de la corte papal.

A su regreso a Alemania se doctora en Teología (1512) e imparte clases sobre el Antiguo y Nuevo Testamento en la Universidad de Wittenberg. Sus clases tuvieron amplio eco entre los estudiantes y el duque elector Federico de Sajonia se convirtió en su incondicional protector. Durante estos años va desarrollando sus teorías teológicas, fijando sus tesis en 1517, ganando un amplio número de partidarios. Johannes Eck se convierte en uno de sus principales detractores e intenta poner la opinión pública en contra del reformador. Lutero y Eck se enfrentan dialécticamente en Leipzig donde Lutero es tachado de hereje debido a su concepto de Iglesia y su opinión de que la fe es lo único que justifica las acciones de los hombres, fe en el testimonio de la Sagrada Escritura y en el testimonio del Espíritu Santo. Según Lutero, la Iglesia con sus ceremonias y sus sacramentos no fomenta la fe, admitiendo sólo tres: penitencia, bautismo y comunión.

Su enfrentamiento con la Iglesia romana sube de tono cuando condena el pecado de simonía cometido por el Papa, que vendía indulgencias a cambio de limosnas y donaciones para terminar la construcción de San Pedro del Vaticano. En Alemania los dominicos defendían al Papa y amenazaron a Lutero. Éste terminó por refugiarse en Wittenberg, bajo la protección del elector de Sajonia, Federico. Allí pudo al fin publicar sus 95 proposiciones (31 de octubre de 1517) contra la autoridad del papa, los votos monásticos, el celibato, el culto a los santos, dogmas como la transubstanciación, el purgatorio y la eucaristía. Finalmente, expuso su teoría acerca de la justificación por la fe. En Roma, el papa León X condenó a Lutero con la publicación de la bula "Exsurge domine" a lo que éste contestó tildando de Anticristo al pontífice. La bula era quemada por el monje el 10 de diciembre de 1520 y el pontífice le excomulgaba. La división entre la Iglesia romana y Alemania estaba abierta.

La convocatoria de la Dieta de Worms en 1521 bajo la presidencia de Carlos V intentó suavizar la tensión, llamando a Lutero a declarar ante el emperador el 16 de abril. El monje no se retractó de sus escritos ni de sus actitudes por lo que fue declarado proscrito, ordenando que sus libros fueran quemados y enviándole a la cárcel. Federico de Sajonia se convirtió en su máximo defensor y refugió a Lutero en el castillo de Wartburg. Desde ese momento se dedicó a la traducción al alemán de la Biblia, instrumento fundamental para su concepción religiosa. Lutero abandonó a su protector y se refugió en la universidad de Wittenberg donde continuó su enseñanza de la Biblia y orientó el movimiento reformista.

En 1525 la reforma vive uno de sus más graves momentos debido al estallido de la guerra entre campesinos y señores, motivada en parte por las tesis luteranas de igualdad de la cristiandad. En un principio los campesinos recibieron el apoyo del reformador pero Lutero pronto cambió de opinión y se puso del lado de los príncipes, animando a la represión de la revuelta. El prestigio del monje cayó muchos enteros y aparecieron nuevos líderes reformistas como Zwinglio, Carlostadio, Münzer y Storch, provocando la escisión de la reforma luterana con la aparición del anabaptismo. Lutero se trasladó a Wittenberg para imponer el orden, saliendo fortalecido del envite.
Para dar ejemplo de la abolición radical del celibato en 1525 se casó con una monja, Catalina de Bora -monja cisterciense veinte años más joven que había abandonado el monasterio-, naciendo seis hijos de este enlace.

En los siguientes años predicó su reforma por toda Alemania, organizó su Iglesia por ordenanzas de los príncipes alemanes y aseguró su triunfo en el pacto de Nüremberg de 1532, donde se concedía a la nueva religión el ejercicio público de su culto. La convocatoria del Concilio de Trento por el papa León X será contestada por Lutero con el escrito "Contra el Papado romano" al tiempo que iniciaba una predicación contra el papado por todo el territorio alemán. Tradujo al alemán la Biblia y la comentó. Escribió la "Exhortación a la paz", el "Catecismo alemán", la "Misa Alemana" y la "Kirchenpostille" entre otras obras.

Cansado, con la salud muy debilitada -debido a una lesión en la artera coronaria- y en parte decepcionado, los últimos años de Lutero le trajeron enfrentamientos con sus seguidores. Sus energías se agotaron cuando viajó a Mansfeld para mediar en las disensiones entre los señores de la ciudad. La enfermedad del mal de la piedra le provocó el fallecimiento en Eisleben, en 1546. En su entierro Melanchton pronunciaría su brillante elogio fúnebre. (vid., artehistoria.es).

Por lo que respecta a sus famosas 95 tesis aquí os dejo un enlace donde fácilmente podéis acceder a ellas. Del mismo modo si a alguien le interesa el tema os propongo leer un artículo sobre Lutero escrito por la persona que más sabe sobre el tema en España, el profesor Teófanes Egido. Si alguien me presentase un buen resumen sobre dicho ensayo puede subir hasta un punto en la nota final.




LA ANTROPOLOGÍA PLATÓNICO. EL MITO DEL CARRO ALADO

Mito del Carro Alado


Alegoría que utiliza Platón para describir las partes del alma y el afán humano por el conocimiento y el ser.

En el diálogo Fedro Platón trata la cuestión del la esencia y partes del alma. Comienza señalando que parece más adecuada, dada la dificultad del tema, la exposición alegórica que la investigación racional e inmediatamente nos presenta el mito del carro alado. Veamos un resumen literal del mismo: el alma es como una fuerza natural que mantienen unidos un carro y su auriga, sostenidos por alas. Los caballos y los aurigas de los dioses son todos ellos buenos; los de los hombres no. En nuestro caso, el auriga guía una pareja de caballos, uno hermoso y bueno, otro feo y malo, por lo que para nosotros la conducción resultará dura y difícil.

El alma tiene como tarea el cuidado de lo que es inanimado y recorre todo el cielo. Cuando es perfecta vuela por las alturas y administra todo el mundo; en cambio la que ha perdido las alas es arrastrada hasta que se apodera de algo sólido donde se establece tomando un cuerpo terrestre. A causa de la fuerza del alma, este cuerpo parece moverse a sí mismo y ambos ―cuerpo y alma― reciben el nombre de ser viviente.

La fuerza del ala consiste en llevar hacia arriba lo pesado, elevándose hacia el lugar en donde habitan los dioses. Lo divino es hermoso, sabio y bueno y esto es lo que más alimenta y hace crecer las alas; en cambio lo vergonzoso, lo malo y todas las demás cosas contrarias a aquellas las consume y las hace perecer. Dirigidas por Zeus, las almas de los dioses y las de los hombres marchan por el cielo ordenando y cuidando todo. Después de realizar su tarea van a buscar su alimento hacia el mundo supraceleste, hacia la realidad que se encuentra más allá de la bóveda del cielo. En ese lugar se halla la Justicia, la esencia cuyo ser es realmente ser, el ser incoloro, intangible, cuya esencia es sólo vista por el entendimiento, piloto del alma, y alrededor de la que crece el verdadero Saber, pero no la ciencia de lo que nace y muere, de lo relativo, sino la ciencia de lo que es verdaderamente ser.

Las almas de los dioses, dado que son conducidas por dos caballos buenos y dóciles, ascienden sin problemas. La mente de los dioses se nutre de un saber y entender puro por lo que al ver lo que allí se encuentra, se alimenta, se llena de contento y descansa hasta que el movimiento, en su ronda, la vuelve a su sitio. Las almas de los hombres suben con dificultad pues el caballo que tiene mala constitución es pesado e inclina y fatiga al auriga que no lo ha alimentado convenientemente. Así se encuentra el alma con su dura y fatigosa prueba.
De las almas humanas, la que mejor ha seguido al dios y más se le parece consigue ver algo, otras no pueden alcanzar la visión del ser, por lo que les queda la opinión por alimento, “el porqué de todo este empeño por divisar dónde está la llanura de la Verdad, se debe a que el pasto adecuado para la mejor parte del alma es el que viene del prado que allí hay, y el que la naturaleza del ala, que hace ligera al alma, de él se nutre.” Las almas que no han podido vislumbrar nada de lo que allí se encuentra se van gravitando llenas de olvido y dejadez, pierden las alas y caen a tierra.

Las siguientes tesis resumen la interpretación más sencilla del mito:

* el alma es el principio de vida gracias al cual los seres vivos pueden realizar los movimientos que le son propios.
* las cosas naturales están dirigidas y controladas por la divinidad (hipótesis providencialista y teleológica que luego encontraremos en gran parte de la filosofía posterior).
* el alma humana participa de algún modo de la naturaleza divina, pero también de un principio opuesto que la pervierte y la hace caer al mundo de la finitud, contingencia y muerte; la parte más excelente del alma humana es semejante a la mente de los dioses y, como la de ellos, se nutre del conocimiento.
*frente a la realidad física, más allá de la Naturaleza, en el “ámbito supraceleste”, se encuentra la auténtica realidad, el ser verdadero caracterizado como la esencia que permanece siempre idéntica a sí misma, que carece de propiedades físicas (“incolora e intangible”) y se ofrece sólo al entendimiento (dualismo ontológico).
*nuestro destino está en ese mundo perfecto, mundo al que se llega básicamente mediante la Ciencia de lo absoluto (la filosofía o dialéctica) no mediante el conocimiento de lo relativo y mudable (la opinión).
*cuando se encarna, el alma olvida aquello que ha conseguido vislumbrar en el mundo supraceleste (rudimentos de la teoría de la reminiscencia).
*es habitual también buscar la correspondencia de las partes del alma con los elementos que aparecen en el mito del carro alado: el auriga representa la parte racional, destinada a la dirección de la vida humana, al conocimiento y lo más divino que se encuentra en nosotros; el caballo bueno representa la parte irascible, aquello que permite al alma la realización de acciones buenas y bellas; el caballo malo y rebelde representa la parte concupiscible, aquello que fomenta en nosotros deseos y pasiones y que nos impulsa hacia el ámbito de lo sensible.

Este mito resume perfectamente la propuesta que recorre la totalidad de la filosofía platónica: realizar en esta vida y de forma radical la belleza, verdad y bondad (dado que “lo divino es hermoso, sabio y bueno y esto es lo que más alimenta y hace crecer las alas”).

"Sobre su inmortalidad, pues, basta con lo dicho. Acerca de su idea debe decirse lo siguiente: descubrir cómo es el alma sería cosa de una investigación en todos los sentidos y totalmente divina, además de larga; pero decir a qué es semejante puede ser el objeto de una investigación humana y más breve; procedamos, por consiguiente, así. Es, pues, semejante el alma a cierta fuerza natural que mantiene unidos un carro y su auriga, sostenidos por alas. Los caballos y aurigas de los dioses son todos ellos buenos y constituidos de buenos elementos; los de los demás están mezclados. En primer lugar, tratándose de nosotros, el conductor guía una pareja de caballos; después, de los caballos, el uno es hermoso, bueno y constituido de elementos de la misma índole; el otro está constituido de elementos contrarios y es él mismo contrario. En consecuencia, en nosotros resulta necesariamente dura y difícil la conducción.
Hemos de intentar ahora decir cómo el ser viviente ha venido a llamarse "mortal" e "inmortal". Toda alma está al cuidado de lo que es inanimado, y recorre todo el cielo, revistiendo unas veces una forma y otras otra. Y así, cuando es perfecta y alada, vuela por las alturas y administra todo el mundo; en cambio, la que ha perdido las alas es arrastrada hasta que se apodera de algo sólido donde se establece tomando un cuerpo terrestre que parece moverse a sí mismo a causa de la fuerza de aquella, y este todo, alma y cuerpo unidos, se llama ser viviente y tiene el sobrenombre de mortal. En cuanto al inmortal, no hay ningún razonamiento que nos permita explicarlo racionalmente; pero, no habiéndola visto ni comprendido de un modo suficiente, nos forjamos de la divinidad una idea representándonosla como un ser viviente inmortal, con alma y cuerpo naturalmente unidos por toda la eternidad. Esto, sin embargo, que sea y se exponga como agrade a la divinidad. Consideremos la causa de la pérdida de las alas, y por la que se le desprenden al alma. Es algo así como lo que sigue.
La fuerza del ala consiste, naturalmente, en llevar hacia arriba lo pesado, elevándose por donde habita la raza de los dioses, y así es, en cierto modo, de todo lo relacionado con el cuerpo, lo que en más grado participa de lo divino. Ahora bien: lo divino es hermoso, sabio, bueno, y todo lo que es de esta índole; esto es, pues, lo que más alimenta y hace crecer las alas; en cambio, lo vergonzoso, lo malo, y todas las demás cosas contrarias a aquellas, las consume y las hace perecer. Pues bien: el gran jefe del cielo, Zeus, dirigiendo su carro alado, marcha el primero, ordenándolo todo y cuidándolo. Le sigue un ejército de dioses y demonios ordenado en once divisiones pues Hestia queda en la casa de los dioses, sola. Todos los demás clasificados en el número de los doce y considerados como dioses directores van al frente de la fila que a cada uno ha sido asignada. Son muchos en verdad, y beatíficos, los espectáculos que ofrecen las rutas del interior del cielo que la raza de los bienaventurados recorre llevando a cabo cada uno su propia misión, y los sigue el que persevera en el querer y en el poder, pues la Envidia está fuera del coro de los dioses. Ahora bien, siempre que van al banquete y al festín, marchan hacia las regiones escarpadas que conducen a la cima de la bóveda del cielo. Por allí, los carros de los dioses, bien equilibrados y dóciles a las riendas, marchan fácilmente, pero los otros con dificultad, pues el caballo que tiene mala constitución es pesado e inclina hacia la tierra y fatiga al auriga que no lo ha alimentado convenientemente. Allí se encuentra el alma con su dura y fatigosa prueba. Pues las que se llaman inmortales, cuando han alcanzado la cima, saliéndose fuera, se alzan sobre la espalda del cielo, y al alzarse se las lleva el movimiento circular en su órbita, y contemplan lo que está al otro lado del cielo.
A este lugar supraceleste, no lo ha cantado poeta alguno de los de aquí abajo, ni lo cantará jamás como merece, pero es algo como esto -ya que se ha de tener el coraje de decir la verdad, y sobre todo cuando es de ella de la que se habla-: porque, incolora, informe, intangible esa esencia cuyo ser es realmente ser, vista sólo por el entendimiento, piloto del alma, y alrededor de la que crece el verdadero saber, ocupa, precisamente, tal lugar. Como la mente de lo divino se alimenta de un entender y saber incontaminado, lo mismo que toda alma que tenga empeño en recibir lo que le conviene, viendo, al cabo del tiempo, el ser, se llena de contento, y en la contemplación de la verdad, encuentra su alimento y bienestar, hasta que el movimiento, en su ronda, la vuelva a su sitio. En esta giro, tiene ante su vista a la misma justicia, tiene antes su vista a la sensatez, tiene ante su vista a la ciencia, y no aquella a la que le es propio la génesis, ni la que, de algún modo, es otra al ser en otro -en eso otro que nosotros llamamos entes-, sino esa ciencia que es de lo que verdaderamente es ser. Y habiendo visto, de la misma manera, todos los otros seres que de verdad son, y nutrida de ellos, se hunde de nuevo en el interior del cielo, y vuelve a su casa. Una vez que ha llegado, el auriga detiene los caballos ante el pesebre, le echa pienso y ambrosía, y los abreva con néctar.
Tal es pues la vida de los dioses. De las otras almas, la que mejor ha seguido al dios y más se le parece, levanta la cabeza del auriga hacia el lugar exterior, siguiendo, en su giro, el movimiento celeste, pero, soliviantada por los caballos, apenas si alcanza a ver los seres. Hay alguna que, a ratos, se alza, a ratos se hunde y, forzada por los caballos, ve unas cosas sí y otras no. Las hay que, deseosas todas de las alturas, siguen adelante, pero no lo consiguen y acaban sumergiéndose en ese movimiento que las arrastra, pateándose y amontonándose, al intentar ser unas más que otras. Confusión, pues, y porfías y supremas fatigas donde, por torpeza de los aurigas, se quedan muchas renqueantes, y a otras muchas se les parten muchas alas. Todas, en fin, después de tantas penas, tiene que irse sin haber podido alcanzar la visión del ser; y, una vez que se han ido, les queda sólo la opinión por alimento. El porqué de todo este empeño por divisar dónde está la llanura de la Verdad, se debe a que el pasto adecuado para la mejor parte del alma es el que viene del prado que allí hay, y el que la naturaleza del ala, que hace ligera al alma, de él se nutre. Así es, pues, el precepto de Adrastea. Cualquier alma, que, en el séquito de lo divino, haya vislumbrado algo de lo verdadero, estará indemne hasta el próximo giro y, siempre que haga lo mismo, estará libre de daño. Pero cuando, por no haber podido seguirlo, no lo ha visto, y por cualquier azaroso suceso se va gravitando llena de olvido y dejadez, debido a este lastre, pierde las alas y cae a tierra"

Fedro, 246 d 3- 248 d

VIDEO SOBRE EL MITO DEL CARRO ALADO



A modo de recapitulación resulta interesante el siguiente power point en el que se incide en a relación de esta teoría con el resto del plan filosófico de Platón. Igualmente de OBLIGADA consulta es el siguiente enlace en el que podemos encontrar una magnífica síntesis de lo visto en clase.

¿Quieres saber más?

PLATÓN. TEORÍA DE LAS IDEAS

PLATÓN O LOS IDEALES POLÍTICOS


  1. VIDA (http://www.webdianoia.com/platon/platon_bio.htm)
    i. Los estudios de Platón
    ii. Los viajes de Platón
    iii. La Academia y sus programas
  2. TEORÍAS: 

    LA TEORÍA DE LAS IDEAS DE PLATÓN
  1. Plan Filosófico. Objetivos de la teoría.
  • POLÍTICO: Platón intenta conseguir la reforma del Estado ateniense, que lo consideraba fuertemente deteriorado por la influencia sofista escéptica. Los que gobiernan deben ser filósofos, no por ambición, sino en conformidad con el mundo de las ideas.
  • ÉTICO: Platón, discípulo de Sócrates, mantiene el intelectualismo moral de éste. Así fundamenta la virtud en el saber. Alguien será bueno y justo si conoce las ideas de bondad y de justicia. Las ideas son eternas e inmutables.
  • CIENTÍFICO: La ciencia (epistéme) trata sobre los objetos estables y permanentes. Los objetos sensibles son cambiantes. Por este motivo, la ciencia necesita entonces de la existencia de las ideas.
2. Contexto histórico

3. Formulación y caracterización de la teoría:
  • Aparece en el periodo de madurez en el que escribe Fedón, Fedro y la República.
  • Tesis fundamental
  • Antecedentes de la teoría
  • Concepto de idea.
  • Dualismo cosmológico: caracterización de ambos mundos.
  • Tipos de ideas y jerarquización: las ideas están jerarquizadas, es decir, unas son más importantes que otras en la escala ontológica, y rigen las superiores sobre las inferiores. En la cumbre de todas las ideas aparece la idea de BIEN (causa última de la verdad y causa última del ser de las cosas). Debajo de ella se encuentran las ideas de BELLEZA, JUSTICIA, UNIDAD y SER. Por debajo, las ideas de opuestos: MOVIMIENTO/REPOSO,IDENTIDAD/DIVERSIDAD,IGUALDAD/DESIGUALDAD; más abajo las ideas MATEMÁTICAS (números, figuras geométricas) y después las ideas de las COSAS SENSIBLES (hombre, caballo, mesa, hoja). Por estar jerarquizadas, el conjunto del as ideas forma un SISTEMA que se presenta como clave explicativa del mundo físico y del mundo moral. Por tanto, el conocimiento de las ideas sirve para conocer las esencias, pero también para orientar el comportamiento moral.
4. Implicaciones
 
5. Revisión y objeciones
  • No comprende la sintaxis filosófica. Fracasa en cuanto se trata de ver lo grande que es el abismo entre lo universal y lo particular.
  • Platón se halla continuamente en confusión, porque no entiende los términos relativos.
  • Según Platón, el conocimiento y la opinión deben referirse a diferentes cuestiones. Según éste lo que en algún momento puede ser tema de opiniones nunca puede serlo de conocimiento.
  • ¿Existen ideas para todas y cada una de las cosas?
  • ¿En qué medida participan o imitan los particulares de sus correspondientes ideas?
  • Para unir el particular con la Idea hace falta una conexión. Esta conexión ¿es una nueva idea?

FELIPE II (1556-1598)

A continuación os presento una serrie de videos y enlaces que os serán de gran ayuda para prepara el próximo examen. Se trata de materiales que hemos empleado en clase y que, por tanto, debéis trabajar.
Aquelos que queráis conocer de primera mano cómo era la vida de Felipe II os recomiendo la lectura de un artículo de prensa aparecido en El Mundo. En este artículo escrito por el prestigioso hispanista Henry Kamen, se expone una ilustrativa visión sobre la vida de Felipe II, aludiendo a sus diferentes facetas en el ámbito laboral, religioso o familiar.

Por lo que respecta a la política exterior de Felipe II os muestro dos de los documentales vistos y comentados en clase en clase:

ESQUEMA DE SU REINADO



FELIPE II, política internacional



BATALLA DE LEPANTO




LA GRAN ARMADA



Erase una vez el hombre 15 El siglo de oro español 1 a 3






A VUELTAS CON EL CONTRACTUALISMO

¿Cómo sería la vida del ser humano si no hubiera leyes ni gobierno? Las teorías contractualistas surgen en el mundo con el ascenso de...